Dirigir un grupo de personas requiere habilidades especiales, ya sean innatas o adquiridas con la experiencia laboral, dedicación, paciencia y disposición para escuchar y apoyar al otro.
Las organizaciones se caracterizan por tener colaboradores orientados al logro, que asumen el liderazgo como un reto para guiar al equipo de trabajo en las metas propuestas. Los líderes son reconocidos porque ponen al servicio de la organización sus conocimientos, experiencia y habilidades para obtener los mejores resultados.
Entrevista a Juan Ricardo Orduz, Consultor Desarrollo Humano
Con el inicio de la pandemia, el teletrabajo y la transformación digital, los esquemas de liderazgo tradicional han cambiado. Ahora esta nueva realidad dificulta el sostener el esquema de control habitual que pasa por centralizar a las personas en una oficina con horarios, normas y procedimientos, lo cual genera la necesidad de confiar en lo “que hagan y digan” los colaboradores.
El Futuro parece plantearse en un esquema mixto: medio tiempo oficina y medio tiempo casa, lo cual implicará un desafío para el trabajo en equipo y liderazgo. El teletrabajo tiene sus ventajas: las tareas, discusiones y planteamientos se hacen de manera más inmediata, precisa y en menos tiempo.
Pero con estas ventajas vienen las luchas más grandes entre el liderazgo centrado en la confianza y los resultados y la manera tradicional de liderar, lo cual trae un cambio fundamental y da paso a lo que denominamos como “virtualidad responsable”.
¿Qué dificultades o situaciones se presentan para el liderazgo desde la óptica del teletrabajo?
- Mantener el foco y atención en las reuniones. El estar en casa ocasiona que las personas estén dispersas haciendo varias cosas a la vez.
- El teletrabajo supone que se deben establecer nuevos mecanismos de organización: ¿Cómo racionalizarlo?, ¿Cómo entender a las personas?, ¿Cómo establecer las nuevas normas del juego?” Hay mayor discrecionalidad en el control de los colaboradores “
- Normalmente los horarios no son respetados: se atienden reuniones y llamadas a toda hora e inclusive los fines de semana.
- Se mezcla la vida personal con la laboral, no hay una división clara y se entremezclan a lo largo del día.
- Impera la necesidad de generar un método de “autogestión “para desarrollar un buen liderazgo. Es el momento de aprender a delegar y confiar en las habilidades y el compromiso del equipo de trabajo.
¿Qué recomendamos a los lideres para evolucionar en estos momentos?
“Liderazgo implica: desarrollo humano, confianza y autogestión”. Por eso a continuación se enumera en que se deben preparar los líderes en esta época de cambios y de incertidumbre:
1. Construir compromisos solidos con sus equipos de trabajo y aprender a delegar con confianza.
2. Reforzar sus habilidades de comunicación: saber transmitir claramente lo que quiere y sus expectativas, lo que no funciona y sobre todo motivar e inspirar a las personas.
3. Manejar de manera adecuada la presión y la ansiedad: en estos tiempos todas las personas sienten diversos miedos. La meditación y el yoga pueden ayudar con el control emocional. El manejar espacios de desconexión y relajación y hacer pausas después de largas jornadas virtuales también ayuda.
4. Tomar decisiones y facilitar las mismas en el equipo.
5. Agradecer todas las cosas buenas que tiene: El lujo de la pandemia es la salud.
6. Poseer una actitud de servicio hacia la gente: las personas necesitan ser escuchadas y no “regañadas”. Siempre que se pueda ofrecer soluciones.
7. Comprender que es urgente y que es importante: respirar profundo y entender que se puede controlar y que no. “Cuidar el ambiente con el que se relaciona”.
8. Decidir qué información se comparte y cual no: Generar un clima emocional positivo.
¿Cómo afecta positivamente a los líderes estos tiempos de incertidumbre y el teletrabajo?
La pandemia trajo consigo el cambio del proceder del esquema laboral y de la racionalidad del tiempo, ahora bien, ¿Cómo afecta todo esto positivamente a los líderes? ¿Cuáles son las reflexiones que se pueden generar acerca del accionar diario?
1. Pueden revisar su adicción al trabajo y comenzar a equilibrar la calidad de vida personal y profesional.
2. Preocuparse por cuidar al colaborador y la familia.
3. Experimentar crecimiento humano: mejor persona, mejor jefe, mejor líder.
4. Mostrar los mejores liderazgos: los más analíticos, racionales e inteligentes y matizar los liderazgos autoritarios.
“Lo que no se puede negar es que en estos meses se está viviendo el verdadero liderazgo en tiempos de crisis”
Imagen de Elcio Coutinho en Pixabay